La Teoría Polivagal de Porges afirma que el Sistema Nervioso Autónomo del mamífero, en el que se incluye al ser humano, está implicado en dos tipos de estados de inmovilización, uno por miedo y pánico, y otro por amor y pasión. Ambos patrones de respuesta comparten bases fisiológicas comunes, pero los perfiles de respuesta son distintos.
¿Cuál es la diferencia entre ambos sistemas?
La inmovilización por miedo desencadena en un colapso fisiológico y una inhibición funcional de la conducta social y receptividad. Se reduce la frecuencia cardiaca y la presión arterial, lo cual puede desencadenar en un síncope. Sin embargo, el sistema de inmovilización por amor aumenta la conexión, la excitación sexual, mantiene la presión arterial y eleva el umbral de dolor. Se produce un estado de éxtasis psicológico y disponibilidad reproductiva. Una característica importante en este caso es que esta experiencia no está mediada por el atractivo físico, sino impulsada por la confianza y la seguridad percibida, que transforma el sistema de inmovilización desarrollado originalmente para afrontar el miedo, en un sistema que promueve la reproducción.
Esta percepción de seguridad plena llevaría a la liberación de oxitocina, dando lugar a un estado fisiológico positivo, con un deseo intenso de intimar y unirte al ser amado. Por otro lado, es un momento de gran vulnerabilidad, ya que la seguridad percibida te lleva al deseo de entrega plena, a una inmovilización, en este caso por amor.