¿Qué es la transexualidad infantil?
Vamos a empezar diferenciando algunos términos. Cuando una persona experimenta coincidencia entre el sexo y el género asignado al nacer, se hace referencia a una persona cisgénero, en el caso de que no haya coincidencia estaríamos hablando de una persona trans. Por lo tanto, la definición de trans sería una condición que persiste en el tiempo en la que la identidad de género de una persona no coincide con el sexo asignado al nacer. Esta condición puede presentarse en cualquier momento de la vida, pero es más común que se manifieste en la infancia. En este caso, suele iniciarse con una disforia de género, es decir, un malestar o incomodidad persistente con el sexo asignado al nacer.
Otro concepto que debemos tener claro es la Identidad de género. Nos referimos con este término a la sensación interna de ser hombre, mujer o una identidad de género no binaria, se desarrolla generalmente en la infancia y se basa en una combinación de factores biológicos, psicológicos y sociales.
La aceptación de la identidad de género por parte de las familias es fundamental y tiene un impacto muy importante en la salud física y mental de estos niños y jóvenes. Así como el papel del pediatra que tendrá que identificar y contener a la familia en los primeros momentos. (García, 2017).
Características/ Señales de que un niño es transexual
Felipe Murillo (2015) refiere que los niños transexuales pueden comenzar a mostrar señales de su identidad de género desde edades tempranas, incluso con dos años. Estas señales pueden incluir:
- Expresar el deseo de ser del género opuesto. Por ejemplo, un niño que ha sido asignado como niño puede decir “soy una niña” o “quiero ser una niña”.
- Preferir juguetes, actividades y ropa del género opuesto. Por ejemplo, un niño que ha sido asignado como niña puede preferir jugar con coches, jugar a ser superhéroes o vestirse con ropa de niño.
- Rechazo de su sexo asignado. Por ejemplo, un niño que ha sido asignado como niño puede evitar usar pantalones o tener el pelo corto.
A medida que los niños crecen, pueden mostrar signos más obvios de su identidad de género. Estas señales pueden incluir:
- Problemas de autoestima y depresión. Los niños transexuales pueden experimentar angustia emocional debido a la inconsistencia entre su identidad de género y su sexo asignado.
- Sentimiento de exclusión. Pueden sentirse excluidos o marginados por sus compañeros.
- Problemas de comportamiento. Los niños transexuales pueden experimentar problemas de comportamiento, agresión o autolesión.
El suicidio en niños transexuales
De acuerdo con Alessi (2014) estos niños y adolescentes pueden experimentar una serie de desafíos tanto psicológicos, sociales y emocionales, entre los que se encuentran:
- Disforia de género: esta sensación puede causar gran angustia, llevándolos al aislamiento y al desarrollo de problemas de salud mental.
- Aislamiento social: ya que pueden ser objeto de discriminación, acoso e incomprensión no solo por gran parte de la sociedad, sino que en muchos casos también dentro de su propio entorno familiar.
- Problemas familiares: los niños pueden experimentar rechazo por parte de sus familias, causándoles gran dolor y sufrimiento.
Estos conflictos les hacen ser una población extremadamente vulnerable con una alta incidencia de patología de enfermedad mental, como depresión, ansiedad, autoagresión, ideación suicida. Distintas investigaciones demuestran que jóvenes transgénero tienen más riesgo de suicido que el resto de la población (Rodríguez, García y Gras, 2019).
Cómo ayudar a un niño transexual
La crianza de un hijo transgénero puede ser un desafío para los padres. Los padres pueden experimentar una serie de emociones, como la confusión, la tristeza, la ira o el miedo. También pueden preocuparse por el bienestar de su hijo, por cómo será tratado por los demás y por cómo afectará su identidad de género a su vida.
Algunas recomendaciones generales de los expertos para las familias con hijos transgénero:
- Fórmese y edúquese sobre la identidad de género y la experiencia transgénero. La mejor manera de apoyar a su hijo/hija transgénero es comprender su identidad y experiencia. Hay muchos recursos disponibles para ayudar a los padres a aprender sobre la identidad de género transgénero, como libros, artículos, sitios web y organizaciones.
- Crear un ambiente seguro y de apoyo. Asegúrese de que su hijo sepa que es amado y aceptado tal como es. Hágale saber que siempre puede hablar con usted sobre cualquier cosa que le preocupe.
- Escuche a su hijo. El mejor regalo que puede darle a su hijo es escucharlo con atención. Deje que sepa que está allí para él y que le importa lo que tiene que decir.
- Hable con su hijo sobre sus necesidades. Cada persona transgénero es diferente, por lo que es importante hablar con su hijo sobre sus necesidades específicas. Pregúntele qué quiere que haga para apoyarlo.
- Busque ayuda profesional. Si tiene dificultades para aceptar la identidad de género de su hijo o si necesita apoyo para comprender cómo apoyarlo, busque ayuda profesional especializada. Hay muchos terapeutas y otros profesionales que están especializados en el trabajo con familias transgénero.
Entre las recomendaciones más específicas que pueden ser útiles para las familias con hijos transgénero:
- Use el nombre y los pronombres preferidos de su hijo. Esto es un gesto simple pero importante que puede mostrarle a su hijo que lo acepta y lo respeta.
- Facilítele la relación con su entorno más cercano. Hable con su hijo sobre cómo quiere que se refieran a él en la escuela y en otros entornos.
- Ayude a su hijo a desarrollar una red de apoyo. Esto puede incluir amigos, familiares, miembros de la comunidad transgénero o grupos de apoyo para padres de hijos transgénero.
- Hable con su hijo sobre los posibles desafíos que puede enfrentar. Esto puede incluir el acoso, la discriminación y la violencia. Es importante que poco a poco vaya adquiriendo herramientas saludables para afrontar las adversidades a las que posiblemente se tenga que enfrentar. No obvie la posibilidad de una ayuda profesional especializada.
- Apoye a su hijo en su proceso de transición. Esto puede incluir permitirle que cambie su nombre, su ropa o su apariencia física.
Es importante recordar que cada familia es diferente y que lo que funciona para una familia puede no funcionar para otra. Lo más importante es que los padres estén abiertos a aprender y crecer, y que siempre pongan las necesidades de su hijo en primer lugar.
Conclusión
Criar a un hijo transgénero puede ser un desafío, pero también es una oportunidad para aprender y crecer. Al educarse, crear un ambiente seguro y de apoyo, escuchar a su hijo y buscar ayuda profesional, puede brindarle a su hijo el amor y el apoyo que necesita para vivir una vida plena y feliz.
Referencias
Alessi, E. J. (2014). A framework for incorporating minority stress theory into treatment with sexual minority clients. Journal of Gay & Lesbian Mental Health, 18(1), 47-66.
Felipe Hurtado-Murillo (2015). Disforia de género en infancia y adolescencia. Guía de práctica clínica. Rev Esp Endocrinol Pediatr 2015; 6 (Suppl).
García Nieto, I. (2017). Infancias y adolescencias trans: herramientas y conocimientos para mejorar su abordaje. Curso de Actualización Pediatría 2017.
Mayor, A. (2018). Avances en la comprensión y el acompañamiento de la transexualidad infantil. Manual integrador hacia la despatologización de las identidades trans. Akadia.
Rodríguez, A., García, M., & Gras, R. (2019). La salud de adolescentes y adultos transgénero: Revisión sistemática desde la perspectiva de género. Revista Iberoamericana de Diagnóstico y Evaluación-e Avaliação Psicológica, 1(50), 5-20.