Se trata de una depresión que aparece tras el parto o incluso puede comenzar durante el embarazo y prolongarse después haber tenido a su bebé.

El trastorno puede durar semanas o meses.

Puede ser leve o grave. En el primer caso puede superarse con apoyo familiar, amigos y sobre todo la pareja. En el segundo caso puede necesitar, además, apoyo de profesionales.

Tienen buena respuesta al tratamiento y la recuperación es completa.

Los síntomas son los mismos que pueden aparecer en cualquier otra depresión: irritabilidad, cansancio, desánimo, insomnio, pérdida de apetito, dificultad para disfrutar, pérdida de deseo sexual, incapacidad de afrontar la maternidad, culpabilidad y sensación de inutilidad y ansiedad.

Algunos factores de riesgo para padecer una depresión postparto son: haber tenido un parto traumático, problemas con la pareja, momento vital difícil, no tener apoyo familiar, amigos o de la pareja, que el bebé padezca alguna enfermedad o sea prematuro.

Las causas desencadenantes pueden ser: cambios hormonales, cambios físicos, emocionales, sociales o que coincida con eventos estresantes en la vida de la mujer.

¿Cómo se puede ayudar usted a sí misma?

Es importante que la mujer se haga consciente de que algo va mal.

Por otro lado, la pareja es importante en estos momentos ya que le puede ayudar a desahogarse. También puede hablar con algún amigo/a o miembro de su familia con los que usted puede sincerarse sobre cómo se está sintiendo. Si no tiene nadie con quién compartir  su estado, contacte con asociaciones y pida ayuda.

Acepte que es muy común la depresión postparto, no se asuste con el diagnóstico.

No trate de ser una super mujer, pida ayuda. En estos momentos usted está sufriendo muchos cambios.

Aproveche cualquier momento que el bebé duerma para descansar usted también. Ahora usted y su bebé es lo más importante, el resto puede esperar.

Aliméntese bien y haga algo de ejercicio.

Encuentre momentos de intimidad con su pareja, aunque sea besos y caricias. Salga con amigos.

No se culpe si no es perfecta, nadie lo es.

Contacte con mujeres que también acaben de tener un bebé y hable con ellas.

Usted va a mejorar, ya que todas las mujeres se recuperan de este trastorno. Aunque parezca que no llega la mejoría debe repetírselo.

Si usted tiene la sensación de que estas indicaciones no son suficientes debe consultar con un profesional, ya que puede necesitar más ayuda.

¿Cómo se puede ayudar desde fuera?

Dedique más tiempo a su mujer, hermana, hija, amiga.

Acepte que es muy común la depresión postparto.

Es posible que si es su pareja, usted también pueda necesitar apoyo social (familiares, amigos…). Cuando viene un bebé a la familia, la pareja se siente más estresada.

En caso de que usted perciba que le es complicado abordar esta situación sería recomendable pedir ayuda a un profesional.